La recaudación impositiva de febrero y marzo anticipa mejora de la actividad económica, según la OPC
El incremento de la recaudación impositiva en términos reales de febrero y marzo anticipa una mejora de la actividad económica para esos meses, luego de que en enero tuviera la menor suba interanual de los últimos diez meses, de acuerdo con el seguimiento de las dos variables que dio a conocer la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC).
La recaudación tributaria de febrero tuvo un incremento real del 8,2% y la de marzo uno del 6,5%, superiores al 0,9% que se registró en enero, lo que permitiría prever una mejora para esos meses del Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE), que se da a conocer con un rezago de aproximadamente 45 días respecto del informe impositivo.
La OPC comprobó una alta correlación entre las dos variables, luego de un seguimiento comparativo a lo largo de los últimos cuatro años, en los que mes a mes la recaudación permitía anticipar crecimientos o caídas del EMAE.
“La recaudación en términos reales continúa reflejando una alta respuesta al nivel de actividad”, remarcó el organismo bicameral en su último informe.
El EMAE correspondiente a febrero será difundido el 21 de abril por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), que a su vez dará a conocer el de marzo el próximo 19 de mayo.
En base a la correlación entre impuestos y actividad económica, el seguimiento de la OPC ayudó tanto a anticipar la caída del EMAE en el primer tramo de la pandemia de coronavirus como su recuperación a partir de agosto de 2020.
En los últimos doce meses, a medida que la base de comparación incorporaba los períodos de recuperación económica, la evolución real de la recaudación fue un indicador útil para prever el crecimiento del EMAE.
De esa manera, el aumento de la recaudación del 20,8% en la recaudación de marzo de 2021 en términos reales sirvió para anticipar el cambio de tendencia del EMAE a partir de ese mismo mes, pero que el Indec dio a conocer el 20 de mayo de ese año, 45 días después.
Abril mostró los porcentajes más altos de crecimiento, tanto en recaudación (40,4% real) como en actividad económica (29,5%), debido a que su base de comparación fue el mismo mes de 2020, el primero de aplicación plena de las restricciones impuestos por el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO).
A partir de entonces, si bien se mantuvo en ambas variables la tendencia positiva, los porcentajes de crecimiento fueron descendiendo, ya que los meses de comparación interanual ya incorporaban mejoras por la flexibilización paulatina de las restricciones.
Así, mayo tuvo una mejora real de la recaudación del 16,1% y del EMAE del 14,4%, junio del 12,5% y 11,7% y julio del 9,9% y 11,7%, respectivamente.
En agosto la recaudación aumentó 8,4% en términos reales y el Estimador 12,8%, en septiembre la primera de las variables subió 5,5% y la actividad 11,3%, en tanto en octubre las mejoras fueron respectivamente de 4,3% y 6,7%.
El último bimestre mostró un repunte reflejado en un incremento del 4,7% en la recaudación real y del 9,2% en el EMAE, variables que crecieron 15% y 10,3% respectivamente en diciembre.
El presente año tuvo un inicio que preocupó a economistas y empresarios, ya que el alza de la recaudación real fue de sólo 0,9% y la del EMAE 5,4%, en ambos casos los menores porcentajes desde el inicio de la recuperación en marzo de 2021.
Sin embargo, los números de la recaudación de febrero y marzo retomaron la senda de los meses anteriores, que podría ser ratificada con los próximos informes del EMAE correspondientes a esos meses. Télam
