Bahillo proyectó que las exportaciones agroindustriales podrían crecer hasta los US$ 85.000 millones
El secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Juan José Bahillo, estimó hoy que las exportaciones del sector agroindustrial podrían escalar de US$ 40.000 a US$ 85.000 millones en los próximos años de la mano de un incremento en la producción de granos, proteínas animales y productos de las economías regionales. (Télam)
Durante su participación en un seminario del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), Bahillo consideró que el país “tiene salida” y es “creciendo, produciendo más, desarrollando más valor agregado en origen, desarrollando las economías regionales con más producción, con más exportación”.
“Por eso podemos pasar en pocos años de los 137 millones de toneladas a 200 millones de toneladas”, dijo Bahillo poniendo en números la producción que generaría esta apuesta diversificada.
Si bien no precisó el período de tiempo que le tomaría a Argentina alcanzar ese volumen de producción, estimó que dicho salto en el volumen representaría un incremento de US$ 17.000 millones.
A esto, mediante una mejora productiva, las economías regionales podrían aportar US$ 10.000 millones, sumado a US$ 3.000 millones más por parte del complejo foresto-industrial, a US$ 8.000 millones en biocombustibles y US$ 7.000 millones en proteína animal.
“Este es un proyecto y un plan que tenemos desde la Secretaría en aporte a lo que nos pide el ministro de Economía, Sergio Massa. Esto nos daría una incrementalidad de US$ 40.000 a US$ 85.000 millones en exportaciones, a lo que tenemos que sumar lo que nosotros estimamos un impacto a la economía local de US$ 14.000 millones”, dijo Bahillo.
Para generar dichas condiciones de crecimiento, el titular de la cartera agropecuaria subrayó como necesario sancionar la Ley de Fomento Agroindustrial, una nueva Ley de Semillas, una elevación en el corte de combustibles fósiles con biocombustibles, una ley de promoción foresto-industrial y una legislación sobre arrendamientos, entre otros puntos.
Este potencial crecimiento “generaría el movimiento de nuestro interior, de nuestros productores, servicios, maquinaria, tecnología”.
Bahillo dijo que esta perspectiva va “más allá de la coyuntura difícil y compleja” que tienen hoy el país, debido a las “externalidades muy negativas del último año”.
En este sentido, Bahillo marcó que las “pérdidas para el país producto de la sequía y la guerra entre Rusia y Ucrania alcanzaron los US$ 25.000 millones”.
Según planteó el funcionario nacional, en base a proyecciones oficiales, la producción de granos caería 30,9% en la presente campaña respecto al ciclo 2021/22, al pasar de 137 millones de toneladas a 94,7 millones.
Esas 42,2 millones de toneladas faltantes se traducen en un saldo exportable de 56 millones de toneladas frente a las 97 millones que se despacharon durante la campaña pasada, dando lugar a una caída en los embarques de 41% hasta el momento, lo que representa una baja en los ingresos de US$ 16.990 millones.
“Cuando a eso le agregamos nada más que el flete y el combustible consumido son US$ 3.000 millones de dólares más (en pérdidas), con lo cual estamos en alrededor de US$ 20.000 menos de ingresos y de menor actividad económica cuando comparamos con la campaña anterior con este solo producto de la sequía”, dijo Bahillo.
A la situación de sequía extrema que vivió Argentina en el último año, se le sumó la guerra entre Rusia y Ucrania, que si bien “podía generar circunstancias favorables para el comercio exterior, lamentablemente no fue así”.
“No fue así porque subió el costo de la energía, de los fletes, de los fertilizantes, y no se tradujo en esa mejora de precios que en principio se tenía como expectativa sobre nuestros commodities”, explicó.
“La guerra a la Argentina le costó US$ 5.080 millones. Entonces, cuando tomamos un periodo de los últimos 12 meses, 14 pongámosle, desde el inicio del conflicto bélico, nuestro país tuvo por externalidades ajenas a nuestras decisiones un déficit de US$ 25 mil millones. Eso explica en parte los problemas que tenemos en la actual coyuntura”, concluyó.